martes, 9 de noviembre de 2010

Hablemos de F1 (y de mineralismo)

Llegamos a la última carrera de la temporada, con el título de campeón del mundo en juego. Se decide todo en una carrera, este fin de semana en Abu Dabi, en el YAS MARINA CIRCUIT.

Alonso parte como favorito al título al estar primero antes de la carrera, y si gana la carrera o queda segundo, es maticamente campeón. Por ello, es el único piloto de la parrilla, de los que se están disputando el título, que depende de sí mismo.

A partir de ahí, si no queda en esos dos puestos anteriormente mencionados, todo serán cábalas, suposiciones, habrá que echar mano de la calculadora, y empezar a sumar puntos, posiciones, etc.




Al hilo de la carrera, sus grandes rivales, los dos pilotos de Red Bull, Vettel y Webber, llevan enfrentados durante toda la temporada, siendo el primero de ellos el niño mimado de la escuderia, pese a no haber liderado en ningún momento el mundial. Se desmarca el director de la escudería, Dietrich Mateschitz, con unas declaraciones en las que niega favoritismos, y que declara preferir quedar segundo a dar ordenes de equipo... ¿? Llevan toda la temporada perfeccionando el coche de uno de ellos...

Pedro Mtez. De La Rosa, ha admitido en una entrevista que si Red Bull tiene que dar órdenes de equipo, las dará. Palabra de un experto de la F1.

Esta guerra interna le puede venir bien a Alonso. Un Alonso que ya vivió en McLaren su propia guerra interna con Hamilton, cuando la escudería apostó por éste último.

Con todos estos ingredientes, esperamos una carrera apasionante.

Y yo me pregunto... ¿cómo celebrará F. Alonso el título si lo gana? ¿Seguirá con los pajaritos? ¿El mineralismo ha llegado?

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